La antepenúltima cita de la temporada 2022 se saldó, como no podía ser de otra manera, con victoria de Max Verstappen. El neerlandés ha batido el récord de 13 victorias en una misma temporada que marcaron Michael Schumacher en 2004 y Sebastian Vettel en 2013. Además, también ha superado el récord de puntos en un año. Le ha faltado el de victorias consecutivas, pero lleva 9 de las últimas 10, siendo Singapur la que le faltó, dónde tuvo que parar en clasificación cuando iba a marcar la pole con mucho margen. Poco que decir, la dupla Max Verstappen-Red Bull es imbatible a día de hoy.
Son imbatibles por muchas cosas. El coche es muy rápido, Max Verstappen es muy rápido, y juntos son inalcanzables. Pero lo cierto es que han provocado un complejo de inferioridad muy grande en los rivales. La de México es otra carrera más esta temporada dónde les sale competencia y acaban ganando sin problemas porque su rival no se atreve a llevar una estrategia normal contra ellos. Les pasó en Monza, con una estrategia a 2 paradas de Ferrari difícil de entender, en Zaandvort, dónde en la última resalida Hamilton mantuvo un neumático usado, en Austin dónde Hamilton puso el duro en lugar del medio en el último stint, y, por último, en México.
Verstappen salía en pole, con los 2 Mercedes, primero Russell y luego Hamilton, detrás, que se habían mostrado veloces. Y cuarto Pérez. No contamos a los Ferrari y descubrirán por qué. El hecho es que los neumáticos que escogieron de salida fueron, los blandos en el caso de Red Bull y los medios en el de Mercedes.
En este caso tiene un pase, pero ya empezó Mercedes buscando hacer lo contrario a Red Bull, cuando en el fin de semana habían mostrado velocidad para poder luchar en igualdad de estrategia. Lo cierto es que la estrategia de los excampeones alemanes parecía tener sentido, porque el blando de Red Bull se degradaría antes, tendrían que hacer muchas vueltas de medio, y ellos tendrían un stint largo de medio al empezar para acabar con blando.
Pero una vez más, por lo que sea, Verstappen y Red Bull están por encima de todas estas conjeturas. En la salida Verstappen mantuvo la primera plaza y Hamilton pasó a Russell, que cayó al cuarto lugar, para ponerse segundo. El neumático más blando del bicampeón se degradó, pasadas 25 vueltas, pero el medio de Hamilton tampoco estaba en las mejores condiciones. En cualquier caso, Hamilton paro 4 vueltas después del bicampeón, lo cual rompe todos los esquemas porque es ir casi a la misma estrategia de Verstappen con peor neumático. Y en efecto, ni siquiera pusieron blando, pusieron duro con la misma esperanza que Ferrari en Monza, que a Verstappen se le vinieran abajo los neumáticos. Y no fue así. Se le cayeron antes los duros a Hamilton que a Verstappen los medios. Y el resultado fue otra victoria de Verstappen con poca oposición. No sabemos qué habría pasado si Mercedes sigue una estrategia más lógica y menos «a la contra”, pero lo cierto es que, una vez más, el que busca hacer lo contrario que Red Bull, pierde. Los rivales deberían haber tomado nota ya de que no pueden confiar en que Red Bull tenga mucho desgaste, porque nunca lo tiene.
Siguiendo con el resto de participantes, detrás de Verstappen y Hamilton, pasó entre nada y menos. Pérez, que pasó a Russell en la salida tras una maniobra discutible de Hamilton que afectó al británico, fue el primero en parar y amenazó la segunda posición del heptacampeón, sin éxito. Russell, el cuarto, tuvo una carrera habitual suya esta temporada. Nada que mirar por detrás, poco que mirar por delante. No tuvo lejos a Pérez, pero nunca le pudo amenazar.
Detrás de ellos acabaron los dos Ferrari, una de las notas más negativas del fin de semana. Estuvieron lejos en clasificación, y en carrera fue un despropósito. Sainz salía quinto, Leclerc séptimo, el monegasco pasó a Bottas en la salida, atacó a Sainz que se defendió, mantuvieron la quinta y sexta plaza, y se acabó su carrera. Ahí fue donde terminaron.
Los bólidos rojos se mostraron completamente faltos de ritmo este fin de semana, estuvieron más cerca de la zona media que de Red Bull y Mercedes. Han sufrido con el setup y han tenido que regular la potencia del motor por fiabilidad, debido a la altitud del Autódromo Hermanos Rodríguez. Veremos en las 2 últimas carreras cuanto ha tenido que ver su bajada de rendimiento con este circuito en particular, pero su pesadilla de año sigue cada vez peor. Para Sainz fue un fin de semana mínimamente positivo, pues superó a Leclerc en clasificación y carrera por puro ritmo por primera vez en la temporada.
Por detrás del «big three» pasaron menos cosas todavía. La gran sorpresa fue Daniel Ricciardo, que con la estrategia medio-blando firmó su carrera más competitiva de toda la temporada para terminar séptimo. Estiró mucho su stint con el medio para poner blando al final. En plena escalada con el blando nuevo tocó a Tsunoda y recibió 10 segundos de sanción, pero su velocidad era tal que pudo abrir ese hueco con el octavo clasificado y no perder la posición.
El octavo fue Esteban Ocon, que parando primero pudo calentar el neumático duro antes que Bottas y adelantarle. El finlandés fue una gran sorpresa, firmó una gran clasificación y volvió a colocar a su Alfa Romeo en posiciones competitivas. Aunque finalmente acabó decimo, pudo sumar un punto y marcar una gran mejora respecto a las últimas carreras. El noveno fue Norris, que volvió a conseguir buenos puntos.
Todos ellos ganaron posición beneficiados por el enésimo desastre del Alpine de Alonso. El asturiano tenía un nuevo fondo plano, que se mostró poco competitivo en el coche de Ocon en Austin, y aún con eso y una difícil clasificación, marcó un ritmo imposible de seguir para los demás. En el primer tramo de la carrera Bottas parecía más rápido, pero le aguantó y en cuanto abrió hueco nadie más le pudo seguir. Incluso comenzó a recortar a los Ferrari, pero al parar más tarde que ellos no se pudo acercar. Iba camino de una séptima posición- que habría tenido que defender de Ricciardo- y una nueva carrera limpia, hasta que falló un cilindro de su motor. Otro nuevo fallo de fiabilidad en su coche. Perdió ritmo, le adelantaron y el motor acabó diciendo basta para acabar retirándose. A estas alturas de la temporada, lo único en lo que piensa el español es en terminar ya 2022 y comenzar su nuevo capítulo en Aston Martin. Ha perdido, sin exagerar, entre 50 y 70 puntos por problemas ajenos a él, y casi con total seguridad será superado en puntos por un compañero de equipo por segunda vez en su carrera, a pesar de haberse mostrado mucho más rápido que Ocon. No sabemos que rendimiento tendrá el Aston Martin de 2023, pero con que sus resultados a final de temporada sean los que el coche número 14 se ha ganado con su rendimiento, ya será un gran avance.
Y esto fue el Gran Premio de México. Hubo otros pilotos que hicieron carreras destacables y tampoco obtuvieron recompensa. Caso de Albon con el Williams que no acabó muy lejos de los puntos o Tsunoda, que hasta el choque de Ricciardo estaba firmando su carrera más solida de la temporada, cerca de los puntos y delante de su compañero Gasly, que acabó undécimo incluso tras una sanción de 10 segundos.
En el fin de semana del 13 de noviembre se celebrará la penúltima carrera de la temporada en Interlagos. Veremos si Aston Martin genera buenas expectativas de nuevo tras otro fin de semana decepcionante, si Ferrari levanta cabeza para mantener el segundo puesto de constructores o si alguien se atreve a frenar a Verstappen.
Imagen de Motorsport.com
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